29/8/2023
Todos los que emprendemos el camino de la recuperación nos encontramos con algunos obstáculos. Si estás intentando superar una adicción al juego, es posible que a menudo sientas el impulso de jugar, aun conociendo las consecuencias.
Sabemos que vencer la adicción al juego puede ser difícil, y evitar una recaída es uno de los mayores retos.
Cómo entender las Recaídas en el Juego
Cuando se trata de la adicción al juego, una recaída significa volver a jugar después de un tiempo. Como cualquier otra adicción, el juego puede ser difícil de superar por completo, y si has tenido un tropiezo, no pierdas la esperanza.
Causas de las Recaídas en el Juego
La recaída en el juego puede deberse a una mezcla de influencias externas y de nuestros propios sentimientos. Tal vez sean problemas de dinero, una discusión con un ser querido, el mero hecho de pasar por delante de un local de juego o quizás ver un anuncio. Por otro lado, sentirse deprimido, estresado o simplemente aburrido puede empujar a cualquier persona hacia viejos hábitos. Así que, para todos aquellos que se encuentren en el camino de la recuperación, es importante mantenerse alerta, reconocer los factores desencadenantes y tener un plan.
Señales de una Recaída en el Juego
Reconocer las señales de alerta de una posible recaída en el juego es crucial para evitar que se agrave. Algunas señales comunes son:
- Pensar constantemente en el juego.
- Ser cada vez más reservado con las cuestiones económicas.
- Pedir dinero prestado o vender objetos personales para mantener los hábitos de juego.
- Descuidar las responsabilidades personales y sociales.
- Mentir a los seres queridos sobre las actividades de juego.
- Sentirse irritable o inquieto cuando se intenta reducir o dejar de jugar.
Estrategias para Afrontar las Recaídas en el Juego
Si tú o alguien que conoces está teniendo una recaída en el juego, recuerda que hay ayuda disponible. Aquí tienes algunas estrategias para afrontar estos momentos difíciles:
- Busca ayuda: Habla con amigos, familiares o un grupo de apoyo sobre tus sentimientos y tus dificultades. Contar con un sistema de apoyo firme es vital para mantener la recuperación.
- Identifica los desencadenantes: Sé consciente de cuáles son tus desencadenantes y evita situaciones o entornos que puedan tentarte a jugar.
- Busca ayuda profesional: Considera la posibilidad de pedir ayuda a un terapeuta o consejero especializado en adicciones. Pueden aportar ideas valiosas y mecanismos de ayuda adaptados a tus necesidades individuales.
- Limita el acceso al dinero: Si te resulta difícil disponer de dinero en efectivo, plantéate ceder el control de tus finanzas a un familiar de confianza o restringir tus gastos en juegos de azar utilizando las soluciones de bloqueo que ofrece tu banco.
- Cuídate: Participa en actividades que fomenten la relajación y el bienestar, como el ejercicio, la meditación, los pasatiempos o pasar tiempo con los seres queridos.
- Fija objetivos realistas: Celebra las pequeñas victorias y establece objetivos alcanzables en tu recuperación y en otros ámbitos de la vida.
- Las recaídas son una oportunidad de aprendizaje: Aprovecha una recaída para aprender de la experiencia e identificar las áreas que necesitan más atención.
Superar la adicción al juego y prevenir las recaídas es un proceso continuo que requiere dedicación y apoyo. Comprender las causas y reconocer los signos de una recaída en el juego antes de que ocurra puede ayudarte a ti y a muchas otras personas a tomar medidas proactivas para hacer frente a los impulsos del juego.
Buscar ayuda es un signo de fortaleza, no de debilidad, y una comunidad de apoyo está dispuesta a ayudarte en tu camino hacia la recuperación.
